En eso se basan las guerras religiosas. El soldado que mata a un enemigo, no está cometiendo un crimen, está obedeciendo la orden de su Dios, que ordena que se mate. La Biblia en el antiguo testamento tiene párrafos que ordenaba cometer crímenes que hoy los calificaríamos de lesa humanidad.

Así, en SAMUEL 15:3 se lee “Ve ahora, y ataca a Amalec, y destruye por completo todo lo que tiene, y no te apiades de él; antes bien, da muerte tanto a hombres como a mujeres, a niños como a niños de pecho, a bueyes como a ovejas, a camellos como a asnos”.

O en EZEQUIEL 9:6, leemos “Matad a viejos, jóvenes, doncellas, niños y mujeres hasta el exterminio, pero no toquéis a ninguno sobre quien esté la señal. Comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, con los ancianos que estaban delante del templo…”

A los alemanes, Hitler los convenció de que los judíos eran sus enemigos, a los que debería exterminar, porque el exterminio de los judíos era la solución final. El estado de Israel está siguiendo los pasos de Hitler, pero ahora son los judíos los que están haciendo la “limpieza étnica” que no es otra cosa que el exterminio de los palestinos.

Pero volvamos al Perú y a Dina Boluarte para entender porque no se arrepiente de las muertes: Es que los miles que marchan en las calles, según los diarios concentrados del grupo El Comercio y los canales de este grupo y todos en general, presentan a los manifestantes como “terroristas”, “comunistas”, “enemigos de la patria”, y por lo tanto, están bien muertos.

Cuando a un pueblo o a un ejército le fijas que otro, sea en tu propio país o un país extranjero, como tu enemigo, la muerte no conmueve, porque estás cumpliendo con tu patria, con tu sociedad, estas eliminando la mala hierba.

Por eso, en su mensaje a la nación, no ha hecho ninguna mención a los muertos y se ha limitado a defender la propuesta de Fuerza Popular para que se realicen las elecciones en octubre y la segunda vuelta en diciembre.

Y la salida no es esa. El pueblo pide su renuncia, una recomposición de la mesa directiva del congreso y un referéndum para una nueva constitución. Así de sencillo.