Los progenitores buscan justificar su desinterés. El Mg. Juan Ortiz Arévalo, presidente de la Corte Superior de Justicia de Ayacucho y la Dra. Rocío Milagros Calle Vargas, Jueza del Tercer Juzgado de Familia con Subespecialidad en Violencia contra las Mujeres e Integrantes del Grupo Familiar, participaron en la reunión del Consejo Regional por los Derechos del Niño, Niña y Adolescentes (CREDNNA), reuniones que permiten articular esfuerzos por la lucha frontal contra todo tipo de violencia que afecta a este grupo humano.
Durante su alocución la magistrada Rocío Vargas Calle, dilucidó los casos que se ventilan en los juzgados de familia, en casos de niños, niñas y adolescentes que son objeto de maltrato, visibilizándose la violencia directa e indirecta, “en los casos de violencia directa se puede registrar que este grupo humano es víctima de maltrato físico por su propio entorno, asimismo, cuando son abandonados por sus progenitores y en muchos casos por incumplimiento en la manutención”.
Del mismo modo, la jueza fue explícita al referirse a la violencia indirecta “Se registran casos que los menores son testigos presenciales del maltrato físico a sus progenitoras y hermanos y en Huamanga, este grupo humano por la propia situación que viven sus progenitores, buscan un desfogue como es el alcohol y las drogas o en algunos casos cambios en su comportamiento siendo rebeldes”. En cuanto a la violencia sexual, la Dra. Rocío Calle, acentuó que los casos de violencia sexual en niños, y niñas es preocupante, siendo los agresores, personas de su propio entorno y en caso de las adolescentes se registra que son violadas por terceros y en estado de inconciencia”.
Medidas adoptadas
Los juzgados de familia otorgan medidas de protección, que incluye la disposición de rondas permanentes a las viviendas de las víctimas, además el control de ejecución, “permanentemente conversamos con las partes y el 90 % no ha concurrido a las terapias psicológicas, justificando que no tienen tiempo para llevar a sus hijos y tampoco ellos concurren a las terapias”.
Finalmente, la jueza de familia, sugirió ante la Vice Ministra de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, Elba Espinoza Ríos, que mediante el Consejo Regional se eleve un documento al Consejo Ejecutivo del Poder Judicial, solicitando que el juzgado transitorio de familia se convierta en juzgado permanente por la excesiva carga procesal.