Se conoció que la Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Huanta, logró ante el Juzgado de Investigación Preparatoria, una prisión preventiva de nueve meses en el establecimiento penitenciario de Huanta.

Pese al tiempo transcurrido, la Fiscalía, increíblemente habría informado a la familia de la afectada que aún no cuenta con las pruebas periciales como para formular acusación. El único camino que tendría el representante del Ministerio Público, sería solicitar una ampliación de la prisión preventiva, caso contrario, el imputado podría salir en libertad.

La madre de la agraviada dijo que el Ministerio Público se estaría aprovechando por ser una persona quechua hablante y desconocer este tipo de procedimientos legales. Además, de que justifican la lentitud de la investigación por la pandemia del COVID 19.

Agregó que los hechos se suscitaron en la comunidad de Llanza el pasado 11 de mayo de 2020. Ese día, luego de realizar sus actividades agrícolas, la menor de iniciales R.G.B. (15) solicitó a su madre permiso para ir una chacra a recoger el jugo de la cabuya, conocido como “UPI”. La mujer aceptó el pedido de su hija, puesto que la acompañante de la menor era una vecina suya.

Pasada las 6 de la tarde, antes de retornar a sus respectivas casas, la niña le dice a su vecina que se antojó de una gaseosa, por lo que le pide a que vaya avanzando para luego darle alcance. En ese trayecto, la menor habría sido interceptada por Edmer Cruz Flores, quien le habría llevado a un lugar descampado para abusar de ella.