La joven intérprete ayacuchana Carolina Luján inició su camino musical a los cuatro años interpretando temas tradicionales de Huamanga. Desde entonces, la música ayacuchana se ha convertido en una parte esencial de su vida y de su formación artística.
“Mis raíces son netamente ayacuchanas, yo nací aquí en Huamanga, por lo tanto, la música se ha vuelto parte de mí desde muy niña”, expresó Luján
En la actualidad, la cantante continúa difundiendo canciones tradicionales, con la convicción de que los jóvenes juegan un papel fundamental en la preservación de este patrimonio cultural.
“Yo diría que el papel que tenemos nosotros los jóvenes es seguir manteniendo la música ayacuchana en su más mínima pureza. Hay géneros que lamentablemente se están perdiendo y no hay nada mejor que mantenerlos con vida”, afirmó.
Para Luján, apostar por la música tradicional en un contexto donde predominan otros géneros modernos es un compromiso con la identidad.
“La música ayacuchana ya viene contribuyendo a mi crecimiento personal. Viene en nuestra sangre y no hay nada mejor que seguir con nuestra música”, señaló.
Además, destacó que este arte es también un vínculo con el idioma quechua y con las raíces culturales de la región.
“La música ayacuchana no solamente contiene el quechua, sino que contiene la poesía en su más mínima pureza. Es el arte vivo de los ayacuchanos”, comentó.
La intérprete invita a los jóvenes a valorar y continuar este legado, convencida de que la difusión de la música tradicional es una forma de fortalecer la identidad cultural de Ayacucho.
Carolina Luján comparte su trabajo a través de redes sociales, donde continúa acercando a nuevas generaciones a la música ayacuchana.
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