“Es muy importante la inversión privada, sobre todo la responsable. En el sur no dejan trabajar a las empresas mineras, las quieren cerrar por conflictos y esto se debe a la falta de política por parte de las autoridades”, mencionó.

Además, refirió que la alta tasa de corrupción en los municipios hace que no ejecuten el presupuesto del canon minero, originando la desconfianza en los pobladores.

Igualmente, indicó que la minería y la agricultura podrían ir de la mano en beneficio de sus habitantes. “La minería debería de acompañar al sector agrícola, dotándole de herramientas y presupuesto para que los agricultores puedan mejorar la calidad de sus semillas e industrializar su producción con valor agregado”, explicó.

Acotó que el Perú es un país minero y que “se debe aprovechar estos recursos, siempre y cuando hablemos de una inversión privada razonable y amigable que distribuya bien las utilidades”, detalló.

En tanto, lamentó que exista un divorcio entre las empresas del sur y las del centro. “Deberíamos trabajar en fomentar estas empresas del sur para que participen en las ferias de carácter regional.