La imprudencia del conductor de un auto casi acabó en tragedia tras protagonizar un accidente de tránsito en una calle de uso peatonal.
El chófer del vehículo, de placa de rodaje DOF-678, perdió el control porque se encontraba bajos los efectos del alcohol. La unidad terminó con las llantas hacia arriba en una gradería.
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Sucedió en el distrito de San Juan Bautista hasta donde llegaron bomberos y serenos para remolcar el auto. Solo se reportaron daños materiales; en tanto, el conductor resultó ileso.
En ese momento no había ningún transeúnte, lo que evitó que el caso pase a mayores.
Otro incidente similar ocurrió en el sector de Yanama, en el distrito de Carmen Alto, en la que un menor de 11 años fue atropellado por un negligente chófer que se dio a la fuga.
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La víctima tuvo que ser referido al hospital y continúa bajo observación médica. Salvó de morir; no obstante, requiere de un tratamiento especializado.
Se advirtió que este tipo de accidentes son frecuentes; por ello, los pobladores pidieron a los transportistas a manejar con mayor cuidado y de respetar los límites de velocidad.