No se trata de un adjetivo sobre alguna propiedad de la señora Patricia Benavidez Vargas, sino de la forma como maneja la Fiscalía de la Nación, removiendo de forma sospechosa a quienes investigan casos emblemáticos, en algunos de los cuales, estarían implicados sus familiares o amigos.
Esta en la memoria colectiva, y en algún momento la propia fiscalía y el poder judicial tendrá que investigar estos cambios “especiales” que comenzó con la remoción de la fiscal Bersabeth Revilla, quien estaba viendo la investigación contra Emma Benavides Vargas, hermana de la fiscal Patricia Benavides Vargas.
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Y no se trataba de una investigación cualquiera. La hermana de la titular del Ministerio Público, era investigada por los presuntos delitos de cohecho y asociación ilícita para delinquir en la modalidad de organización criminal.
El diario La República, publicó en ese entonces, que la Jueza Superior Emma Benavides Vargas, habría “cobrado sobornos a cambio de liberar a investigados por narcotráfico, entre los que destacan Roberto Gómez Herrara —alias ‘Huevo’—, quien es considerado por la Interpol como uno de los máximos cabecillas del narcotráfico internacional. También aparece López Quispe, de quien la Policía sospechaba que era el mayor acopiador de cocaína en el Vraem”.
Pero no se limitó a retirar a la fiscal que investigaba a su hermana. Designo a un fiscal, quien, en una rápida investigación de menos de un mes, dispuso el archivamiento de la investigación, quedando libre de toda sospecha la abogada Emma Benavidez Vargas.
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Durante el periodo que está a cargo de la Fiscalía de la Nación, ha realizado diversos cambios en los equipos fiscales, pero el más notorio es la reciente remoción de tres fiscales del equipo que investigaba a los Cuellos Blancos del Puerto, y se da cuando faltas dos meses para que concluya la investigación y se presente la denuncia ante el poder judicial.
El equipo de la fiscal Magaly Quiroz Caballero, estaba formado por Yenny Huacchillo Núñez y Julio César Taboada, quienes conocían todo el proceso de este caso complejo, donde están comprendidos empresarios, jueces superiores del Callao y de la Corte Suprema, entre otros el juez supremo César Hinostroza, más conocido como el “hermanito”.
Con la separación de los tres fiscales, no sería raro que los reemplazantes no estén en capacidad de presentar la denuncia fiscal, por lo que el caso de los “cuellos blancos” correría la misma suerte que la investigación contra Emma Benavides y el colegiado que presidía, es decir se archive.
