El exministro de Economía, oriundo de Ayacucho, Waldo Epifanio Mendoza Bellido, ha manifestado su inquietud al señalar que el país atraviesa una recesión más extensa que la registrada en 1990. En sus declaraciones, destaca que este enfriamiento económico se ha gestado a lo largo de varios años, configurándose como una desaceleración estructural.
«Al llegar a septiembre, habremos acumulado tres trimestres consecutivos de contracción en el Producto Bruto Interno (PBI). Es decir, nos enfrentamos a la recesión más prolongada desde el fujishock de 1991. Es un desafío serio que debemos abordar y que no vivíamos desde hace tres décadas», advirtió Mendoza.
El exministro subrayó que esta recesión no solo se atribuye a las consecuencias del ciclón Yaku o las protestas sociales, sino que se remonta incluso al gobierno de Pedro Castillo, enfocando su análisis desde su perspectiva como ayacuchano.
«Durante la pandemia, el gobierno y el Banco Central implementaron una política macroeconómica altamente expansiva, una medida necesaria en su momento. No obstante, esto implicó el agotamiento de recursos que debían fortalecerse posteriormente. En los años 2021, 2022 y 2023, se adoptaron políticas macroeconómicas contractivas a nivel fiscal y monetario. El Banco Central aumentó las tasas de interés, mientras que el Ministerio de Economía y Finanzas redujo el aspecto fiscal de la economía. Esto, combinado con el impacto del ciclón Yaku y la violencia política, ha generado la recesión más prolongada de las últimas tres décadas», detalló.
Mendoza destacó que el presente año ha sido particularmente desafiante, evidenciado por la disminución del Producto Bruto Interno. Además, hizo hincapié en que la tributación experimentó una caída del 10%, y las importaciones se redujeron en un 14%. «Cuando la producción deja de crecer, nos enfrentamos a un problema», concluyó.