Un humilde padre de familia identificado como Reyder Santiago Huasacca Condori, de 47 años, falleció tras recibir una fuerte descarga eléctrica. El infortunado se ganaba la vida como mecánico en un taller, sin presagiar que todo acabaría de la peor manera.
La tragedia sucedió en un taller mecánico situado por la avenida Universitaria hasta donde llegaron serenos de Huamanga, quienes nada pudieron hacer para auxiliar al varón.
Las primeras informaciones dan cuenta que la víctima habría subido al elevador hidráulico para repararlo cuando sorpresivamente la máquina trifásica, por un corto circuito, lo arrojó contra el pavimento. Sus compañeros de trabajo intentaron prestarle ayuda, pero todo fue en vano.
En un primer momento imaginaron que se había desmayado; sin embargo, al intentar reaccionarlo comprobaron que había fallecido.
Hasta el lugar llegó el representante del Ministerio Público, para proceder con el levantamiento del cadáver, el mismo que fue trasladado a la morgue de Ayacucho a fin de ser sometido a necropsia de ley.
Hasta el lugar llegaron los seres queridos de Reyder Santiago, quienes protagonizaron dramáticas escenas de dolor.
De otro lado, se advirtió que este tipo de giros de negocio no carecen de las medidas de seguridad para este tipo de labores de alto riesgo, a razón de que las conexiones no se encontrarían debidamente instaladas.
Cabe señalar que Santiago Huasacca trabajaba desde hace varios años como mecánico. Durante su última labor de rutina no habría tomado las previsiones del caso y murió de forma sorpresiva, generando una gran conmoción entre sus seres queridos.
La municipalidad distrital de Jesús Nazareno anunció la ejecución de operativos inopinados para constatar la seguridad en las conexiones eléctricas de los distintos talleres de mecánica, que se sitúan por la avenida Salvador Cavero.
